Dragón cóndor

Este artículo es sobre la especie carnívora. Para más usos de Condor, véase Condor (desambiguación).

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Los dragones cóndor^[2] o más conocidos como mantigrues^[1] eran reptiaves voladoras carnívoras nativas de los escarpados acantilados, desiertos y bosques profundos de luna boscosa de Endor. Caminaban en sus patas traseras y utilizaban sus antebrazos para sostener a sus numerosas presas. Poseían crestas óseas a lo largo de su columna vertebral, y una envergadura de aproximadamente 3 metros.

En general, estás aves de gran tamaño atacaban a diversos tipos de presas, como ponis endorianos o los ewoks que los montaban. Los dragones cóndor eran capaces de levantar grandes pesos con sus dos garras traseras. Las mantigrues acostumbraban a llevar a sus presas, no muertas, a sus guaridas, y una vez allí las devoraban. La ferocidad de estas bestias fue aprovechada por personas como Morag para poder adiestrarla.

Biología y apariencia[]

Fly mantigrue — Un dragón cóndor volando.

Los dragones cóndor eran criaturas aladas, que tenían dos largas extremidades unidas a las alas, aunque este extraño aspecto no aparece en todos los individuos de esta especie. Otra curiosa propiedad de estos engendros era su visión aguda. Las mantigrues contaban con largos y afilados dientes, que dividían su mandíbula en dos alargadas cavidades bucales.^[3] Este hecho se podría deber a su dieta carnívora y la separación de huesos y carne que llevaban a cabo con sus presas. Su cuello estaba torcido hacia delante, causando una curva descendiente. Los dragones también tenían una larga cola, de un metro aproximadamente, y dos patas que finalizaban con cuatro dedos. Las mantigrues tenían un color cercano al marrón^[2], o un rosa pálido.^[1]

Sociedad y cultura[]

Mantigrue ewoks es — Una mantigrue domesticada por Morag.

A pesar de ser reconocidas reptiaves depredadoras, que no eran necrófagas, es decir, que no se alimentaban de cadáveres en putrefacción, las mantigrues estaban activas diurna y nocturnamente; y, a pesar de su gran tamaño, sólo se alimentaban de pequeñas criaturas o seres de tamaño medio, que capturaban vivos y que llevaban de regreso a sus cuevas.^[3] Volaban alto y cazaban a sus presas planeaban girando en una espiral descendiente. Los cóndores atacaban produciendo un chillido escalofriante. Se sabe que podían ser amaestrados o domesticados, o al menos ese fue un objetivo alcanzado por Morag, la bruja Tulgah, cerca del 3,5 DBY.^[1] También se les consideraba seguidores o bestias a manos del Espíritu de la Noche y de sus seguidores.

Historia[]

Mantigrue in flight — La mantigrue de Morag.

Los dragones cóndor habitaban Endor, siendo distinguidos por la mayoría de habitantes de esta luna. Eran principalmente conocidos por arrebatar los ponis y caballos de montar a los ewoks, a los que en algunas ocasiones atacaban por la espalda y los dejaban en el suelo.^[2] Este hecho quizás sucediera porque las mantigrues confundieran a los ewoks y los caballos como una sola criatura, y siendo una carga demasiado grande se veían obligadas a dejarlos en tierra. No comían ponis, ya que eran desagradables a su gusto. Los cóndores se alimentaban de "arañas" gigantes de las cuevas de Endor. Vivían en cuevas de piedra excavadas en los acantilados y llanuras de la luna.

Se conoce a un solo miembro que habitaba los acantilados Yawari. Esta criatura intentó fue atraída por Wicket Wystri Warrick, que le comenzó a lanzar huesos de sus presas. mientras tanto, Cindel Towani, le atacó con una antorcha encendida y el animal la agarró dispuesto a tirarla por el abismo. El ewok acudió en su ayuda y la rescató con su ala planeadora, mientras el dragón cóndor la lanzaba al bosque.^[2]

Al ewok Teebo le persiguio una mantigrue mientras volaba en su ala planeadora, que destrozó y obligó a descender a su presa.^[4]

Morag, la bruja Tulgah, en el año 3,5 DBY, había capturado al menos a una mantigrue, que domesticó para que acatase sus órdenes. Para el placer de Morag, esta mantigrue en particular, sería desatada para aterrorizar a los ewoks. A esta criatura se le ordenó arrebatar todas las matas de bayasolares de la Aldea del Árbol Brillante. Los ewoks Wicket W. Warrick, Teebo y la Princesa Kneesaa a Jari Kintaka utilizaron el jabón de raíz sombra para hacer invisibles a las plantas y así salvarlas de la mantigrue.^[1]

El saber de los ewok sostuvo que las mantigrues servían al Espíritu de la Noche, una deidad maligna invisible que contaba con la posesión de la oscuridad de la noche.^[1]

Entre bastidores[]

En un principio se confundieron la mantigrue y el dragón cóndor, aunque más tarde se aceptó como una misma especie. Otra especie parecida a los dragones nativos de la luna de Endor era la bestia del Diablo.^[5] No se sabe si compartieron ascendencia genética.

La mantigrues aparecieron por primera vez en The Adventures of Teebo: A Tale of Magic and Suspense, un libro infantil escrito por Joe Johnston.^[4] Johnston fue también el diseñador de producción de la película Ewoks: La Batalla por Endor, que fue publicada un año más tarde y contó con el dragón cóndor. Las obras de arte conceptuales y los archivos del juego de Star Wars Galaxies también se refieren a la mantigrue como "dragón cóndor".^[6]

El dragón cóndor parece haber sido inspirado en los Nazgûl alados de El Señor de los Anillos, hecho que no es de extrañar, pues se cree que el nombre de Endor proviene de la derivación de Quenya (élfico) del nombre Tierra Media.