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Juyo, "El camino del vornskr"
La Forma VII: Juyo / Vaapad es la séptima forma de combate con sable de luz. Es el resultado de integrar todas las demás formas en un único estilo y adoptar un enfoque de combate agresivo y pragmático. Es también conocida como el Camino del Vornskr.
Formidable tanto en ataque como en defensa, esta forma era quizá la más peligrosa para el usuario, pues la exigente y constante concentración que requería y su similitud con el estilo de combate Sith provocó que muchos de sus usuarios cayeran al lado oscuro.
Descripción[]
Mace Windu utilizando su Vaapad
El Vaapad no buscaba herir o impedir al oponente, sino destruirlo. Para ello se valía de todo tipo de habilidades: veloces movimientos del sable láser, tajantes y precisos; técnicas de combate cuerpo a cuerpo que combinaban fuerza y velocidad; uso del sable para repeler el fuego de pistolas láser y rayos de Fuerza (absorbiéndolo o haciéndolo rebotar)... todo para lidiar con cualquier situación o circunstancia posibles en un combate. Se servía de la Fuerza para potenciar las capacidades físicas del usuario: voltear, saltar, correr, e incluso recubrir el cuerpo a modo de armadura (la cual podía ser usada de forma ofensiva en el combate, con o sin sable láser), lo que permitía mantener combates prolongados. También se empleaba para el lanzamiento de objetos -normalmente de tamaño medio o comprimidos, aunque también podían lanzarse objetos de gran tamaño-, o bien su uso como escudo.
Este estilo de lucha era muy inusual entre los Jedi. Fue utilizada por el maestro Mace Windu, quien fue uno de los grandes maestros que llegó a dominarla. A través de los años, aprendió la forma IV con el maestro Yoda y la forma III con Obi-Wan. Su interés por aprender de otros lo llevó al dominio de las seis formas, adoptando así sin querer la forma VII. A diferencia de las demás, esta forma de combate podía ser empleada sin el uso de un sable láser, empleando únicamente las habilidades cuerpo a cuerpo del usuario y el uso de la Fuerza.
Solamente dos Jedi llegaron a la maestría total del Vaapad: el ya citado Windu y Depa Billaba, entrenada por el primero (aunque finalmente acabaría cayendo al lado oscuro). Sora Bulq instruyó a Quinlan Vos en algunos conocimientos básicos de esta forma, pero nunca llegó a alcanzar la maestría. Se creía que Plo Koon también controlaba el Vaapad, pero que decidiría emplear la forma V en su lugar por considerarlo demasiado peligroso. En KOTOR II se menciona a un Maestro Kavar que enseñaba esta técnica. Darth Maul también fue entrenado en esta forma de combate, al igual que Galen Marek, aunque este utilizaba un estilo más personalizado: unía su sable láser a sus poderes de rayos de la Fuerza, creando así un halo electrificado que envolvía su sable láser multiplicando el daño que infligía a sus oponentes. Esta habilidad de emplear poderes de la Fuerza por medio del sable láser sólo llegó a ser dominada por Marek y por Darth Nihilus.
Potente y tajante golpe destructivo de la Forma VII contra Jango Fett
El término "Vaapad" venía de un depredador del planeta Sarapin y sus lunas. Un Vaapad no tenía menos de siete tentáculos, y el espécimen más grande encontrado tenía veintitrés. Los tentáculos de la bestia se movían tan extremadamente rápido que no había manera de contarlos, salvo que la criatura estuviese muerta o reposando.
Con respecto al Juyo regular, no era tan poderoso como el Vaapad pero disminuía el riesgo en caer al Lado Oscuro. Compartía con él técnicas marciales como golpes fuertes y rápidos, así como el uso de la Fuerza para potenciar al usuario. Podía ser aprendido de manera más fácil que el Vaapad, pero aún así requería entrenamiento en este para poder alcanzar la maestría.
La característica más distintiva del Vaapad, así como la causa de su peligrosidad, es que se sirve de las emociones del usuario para potenciar los ataques, al igual que el estilo de combate Sith. Sin embargo, no eran simples emociones desatadas: la férrea disciplina del Vaapad actuaba a modo de catalizador emocional que transformaba la oscuridad interna del usuario en un poder de luz. El estado mental requerido para conseguir esto precisaba que el practicante del Vaapad estuviera dispuesto a experimentar (y controlar) emociones como el disfrute de la pelea, el terror provocado por las masacres de la guerra, y las ansias de victoria. También era un conductor reversible: podía tomar la ira, el odio y la furia del oponente y reflejarlas hacia él.
Windu y Sidous combatiendo a muerte
El Vaapad era el estilo más completo, versátil y peligroso de todos; un camino que llevaba al practicante a través de la penumbra entre los lados luminoso y oscuro de la Fuerza. De todos los practicantes regulares del Vaapad, sólo Mace Windu pudo mantener la concentración necesaria para no sucumbir al lado oscuro. En su lucha contra Palpatine, utilizó la propia velocidad, fuerza, rabia y odio del Sith en contra de este, lo que le permitió superar la contienda. También reflejó los rayos de Fuerza de Sidious contra él mediante el sable láser, dejándolo horriblemente desfigurado. Lo hubiera matado de no ser por la traición de Anakin Skywalker.